Gracias Señor por cada Mujer; negra, blanca o amarilla…,no importa, porque el amor, la ternura, la cercanía, el cariño, la entrega, la fortaleza interior, la fe, el sueño…,todo esto y mucho más que significa la Mujer, no tiene color ni nacionalidad.
Gracias, Mujer, por tus luchas y sacrificios y conquistas, muchas veces silenciosas y silenciadas, gracias sobre todo por seres guardián de valores y de la fe.